Está sucediendo y, sin embargo, son noticias que no aparecen en las portadas de la prensa. 62.714 refugiados han huido a los países vecinos desde que estalló la última crisis en la República Centroafricana en diciembre del pasado año. De ellos, 40.500 se encuentran en la República Democrática del Congo, 13.087 en Chad, 4.841 en la República del Congo y 4.286 en Camerún. La reciente violencia cerca de la localidad de Kamango en el este de la República Democrática del Congo, ha obligado a más de 66.000 congoleños, aproximadamente el 55 % de los cuales son niños, a buscar refugio en la vecina Uganda. La crisis de Siria está provocando un éxodo de gente sin precedentes desde el genocidio de Ruanda, mareas de gente caminan  con sus pertenencias anudadas sobre la cabeza, huyendo del miedo y el odio. Por otra parte los violentos enfrentamientos del pasado viernes entre musulmanes desplazados y las fuerzas de seguridad en el estado de Rakhine, en Myanmar, han dejado un saldo de un muerto y 10 heridos. El Planeta llora en estos lugares y también en Somalia, Egipto, Franja de Gaza, Bangladesh, Filipinas, Sudán, Irak, Afganistán y en  muchos otros  sitios donde conflictos, quizás de  menor escala están causando  muertes y dolor; un sufrimiento real y desesperado que no  encuentra tregua. Hablo de Papúa, de Jammu y Cachemira, de Birmania, del Magreb, de Libia, del Líbano, de Baréin, de Yemen del Sur……

Una parte de mundo sufre desesperadamente y por aquí ajenos a toda esa gran desdicha, la mayor preocupación parece que es otra.  No hay día que no desayunemos  una buena ración del caso Bárcenas,  del caso de los ERE, de los de la ITV o Palau… etc.   Y si miramos la prensa europea también beberemos ríos de tinta con los  casos de corrupción de otros países como Portugal, Polonia, República Checa, Italia, Bulgaria o Grecia.  De hecho según Transparencia Internacional, la organización más respetada en esta materia que elabora varios análisis de la corrupción en el mundo, quince países de la UE tienen más casos de corrupción que España.

De todos modos hablar de guerra o hablar de hambre en el mundo parece que no hace subir la adrenalina o no aumenta la venta de periódicos y sin embargo 870 millones de personas se  enfrentan  cada día  al hambre más cruel y otros centenares de miles de personas mueren cada día por conflictos armados. Es bueno que se debata sobre corrupción, pero no es lo único que pasa en nuestro mundo.

¿Estamos perdiendo la perspectiva de la realidad o quizás ciertos arboles, nos impiden a menudo ver el resto del bosque? La sociedad necesita un gran tratamiento de desintoxicación para poder mirar con otros ojos la realidad, descubrir la diferencia entre lo urgente y lo importante, lo esencial de lo accesorio, elevarse de lo particular a lo general, penetrar en el sentido profundo de lo que pasa, saber desentrañar el verdadero significado de un hecho y adoptar siempre una cierta actitud crítica y reflexiva ante el bombardeo de titulares que se emiten a diario. Pensar lógicamente no es cosa fácil, formarse una visión coherente del mundo que nos rodea es un ejercicio intelectual que no está al alcance de quien no entiende que para obtenerlo necesita una buena dosis de aprendizaje y esfuerzo.

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com