¿Qué se puede y debe decir de la situación actual? La prima de riesgo sigue en máximos, el 40% de las empresas ve amenazada su continuidad, cinco millones de parados, un millón trescientos mil hogares españoles sin ningún ingreso, un gobierno “en funciones” que solo sabe decir «sálvese quien pueda», un anuncio de elecciones anticipadas que harán que los próximos cuatro meses se hagan eternos, un candidato socialista que no puede generar ilusión de cambio ni esperanza, porque es la continuidad de lo peor del gobierno de Zapatero. El pesimismo es tal que podríamos repetir con el WSJ: «España ya no es dueña de su futuro»
Reflexionando sobre esta afirmación imagino que sucederá cuando se terminen de levantar absolutamente todas las alfombras de las instituciones gobernadas por los socialistas hasta ahora. ¿En que situación se encontrará España? Me temo lo peor. A todo esto hay que añadirle la crisis que vive en la actualidad todo Occidente, que se está jugando su supervivencia frente a las economías emergentes, gracias a la gestión de una serie de políticos irresponsables entre los que se encuentran Zapatero y Obama, que ha emitido deuda a chorros para conseguir a cambio votos mediante el timo de la subvención y la supuesta prestación social y pública
Los ciudadanos se han cansado de tanta corrupción, de tanto despotismo y de tanta mentira, y no me refiero a los “indignados” que acampan por aquí y por allá y, que se van descubriendo cada vez más, amigos de una determinada izquierda incluida la que ya está en el Parlamento. La gente quiere verdad.

Se necesita, por lo tanto, limpiar la suciedad en la función política y purificar así el “sistema”. Es menester mandar a casa a aquellos políticos cuyo único interés es el propio. La verdad nunca es meramente teórica y se demuestra con los hechos. La gente quiere verdad en los procesos democráticos, en la dinámica de los partidos políticos, en la gestión pública, en los medios de comunicación, en los programas lectorales, en la administración de los dineros públicos, en las formas con la que se resuelven los contrastes y los acuerdos entre los partidos. la verdad tiene como objetivo el conocimiento del bien y en este caso el del bien común.

Vuelvo a la pregunta del inicio: ¿Qué se puede y debe decir de la situación actual? Ni como persona ni como periodista se dar una respuesta en sentido estricto. Eso si, quisiera invitar a todos a seguir caminando con la inquietud de la verdad, vivirla y exigirla. Sin duda la única fuerza que puede devolver a nuestra democracia su verdadero sentido. Solo así España volverá a ser dueña de su futuro.

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com

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