Desde que en 1986, España se incorporó a la Comunidad Europea integrada por quice países, hemos visto pasar ante nuestros ojos, muchos anuncios publicitarios, programas especiales, reportajes en todos los medios audiovisulaes y escritos hablándonos del euro o de la importancia de la integración en la U.E., pero en realidad ¿cuánto sabe el ciudadano de a pie sobre este nuevo Sistema Monetario Europeo, o sobre las Instituciones Comunitarias o sobre los mismos presupuestos que sustentan la dinámica de las finanzas comunitarias?. ¿Cuánto nos cuesta a cada andaluz mantener a esos cerca de treinta mil funcionarios que trabajan en todas esas instituciones?. ¿Cuánto recibimos a través de los fondos?.

A estas alturas somos conscientes de que no se trata sólo de saber quién preside actualmente la Comisión Europea o cuántos euros nos costará llenar el depósito de gasolina o si sabremos entendernos con los céntimos.

Por lo pronto y hablando de euro, lo primero que podemos ver es que la nueva moneda afectará a una gran diversidad de departamentos de las empresas; al comercial, al económico, al financiero, al fiscal, al de recursos humanos. Lo que menos se ve todavía es que la creación de este espacio económico europeo, único y homogéneo, para servicios y capitales, puede aumentar las especializaciones regionales y con ello provocar crisis a determinadas regiones o grupos de regiones. Por tanto, lo que más nos debe interesar es saber, qué puede esperar una economía como al andaluza y su tejido empresarial de la Unión Monetaria Europea.

Ya se sabe que el euro no afectará a todas las empresas de la misma manera, dependerá del sector donde opera la empresa, del dominio o dependencia de sus clientes y proveedores, y de su vocación intenacional o de expación, pero sea cual sea la situación de nuestra empresa, ni podemos considerar el euro como una divisa más y darle ese tratamiento, ni esperar a reflexionar sobre qué hacer porque aún no ha llegado el 2002 con la efctiva circulación de billetes.

La Unión monetaria ha abierto un nuevo estadio en la cornformación de la economía de los países que la forman, que afecta directamente a todas las empresas y, en su desarrollo, otros nuevos problemas surgirán como los derivados de la ampliación a nuevos países de Europa central y oriental.

Se está implantando, sin darnos cuenta, una economía de producción altamente competitiva e inspirada en el modelo alemán, (primera potencia industrial de Europa y segunda del mundo) y quizá no estemos suficientemente preparados. Los fondos de cohesión que hoy nos sirven para retocar de alguna manera nuestro déficit presupuestario, antes o después, puede que se nos restrinjan.

Por otra parte, siguen desfilando diariamente ante nuestros ojos, en la pantalla del televisor o en los titulares de la prensa, un listado de Instituciones como El Consejo Europeo, El Consejo de la Unión Europea, El Parlamento Europeo, El Tribunal de Justicia, El Tribunal de Cuentas, El Consejo Económico y Social, El Comité de Regiones, El Banco Europeo de Inversines o el Banco Central Europeo, y otras decenas de entidades y órganos, que conforman el sistema organizativo de la Unión Europea, que a diario plasman iniciativas,posiciones y acciones comunes en actos legislativos y cuya aplicación es inmediata a todos los Estados, afectándome a mí y al vecino, que poco o nada conocemos de esas encrucijadas e intríngulis de funcionamiento de esas Instituciones, pero que de alguna manera ambos estamos condicionados por las deciciones que toman.

Todos nos encontramos, queriéndolo o no, dentro del laberinto de la construcción europea y no tenemos más guía que la propia curiosidad. Es urgente que sepamos quién hace qué en Europa y quién se responsabiliza ante nosotros. Bruselas puede estar cerca o lejos, ser un espejismo, un chivo expiatorio o un faro de luz, lo que no podemos es permanecer ajenos a lo que se cocina desde allí para todos nosotros. Como tampoco podemos tragarnos el cuento de que el euro es la nivelación virtual de todas las nacioes europeas.

Tenemos ante nuestros ojos un boceto inacabado de Europa, una red multiforme de procedimientos, algo más que sólo burocracia, “un destino desde ahora compartido” y aceptado si nuestro interés y nuestra curiosidad navegan en sus entrañas.

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com