Desde siempre, los humanos han soñado un mundo perfecto. A veces mirando atrás y proyectándolo  en el pasado, imaginando la vida en el  Jardín del Edén. Otras veces imaginando un futuro lleno de perfección en este o en otro lugar de nuestra galaxia. El ser humano siempre intenta con su fantasía iniciar el viaje infinito hacia el país de la Utopía, hacia la sociedad perfecta, hacia la tierra de la felicidad.   De vez en cuando aparece un “profeta” y lanza la idea de una tierra prometida. Visionarios que imaginan un país de nunca jamás, una torre de Babel, una isla paradisiaca en  medio del mar… Tierras prometidas se han anunciado tantas pero no hemos conocido ninguna.  Cataluña independiente es hoy la tierra prometida de Artur Más.  En estos tiempos se ha erigido como el profeta que guiará a Cataluña a la “tierra fértil”. No sé si este profesional de la política intenta pasar a la historia como lo hicieron Rebelais, Fourier, Sade, Marx, Lafargue o Abbott que también hablaron de tierras prometidas aunque nunca nos llevaron a ella. Mas habla copiándole el estilo a Moisés y Abraham;  habla de « una tierra fértil, productiva y donde crezcan las semillas». Dice que Cataluña se encuentra ahora en medio de un desfiladero y que no tiene otra salida que salir hacia adelante si no quiere “pasar hambre y frio”: la marcha atrás, para este nuevo mesías de la política, sería volver “a un pedregal”, a una “tierra poco amable, donde las semillas no dan fruto” Una historia para tocar los sentimientos de la gente, una historia que difícilmente podrá tener final feliz,  una historia construida de ensueños que puede terminar en pesadilla.

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com