De camino a una reunión he entrado en una librería, mis ojos han paseado por las cubiertas de los libros expuestos en la mesa de novedades. Tengo que confesar que ha sido una delicia y al mismo tiempo he constatado cuanto se ha avanzado en el diseño grafico aplicado al mundo editorial.

Trabajé hace algunos años en el mundo editorial. Conocí a fondo la cocina de la industria del libro, encontrándome a menudo en el departamento de marketing preparando el lanzamiento de una novedad o escogiendo la cubierta de una obra. Es un elemento que se ha desarrollado forzosamente desde los origines de la imprenta  para que la industria del libro se hiciera comercialmente competitiva.

La cubierta del libro es elemento clave en el primer encuentro entre lector y libro.  Es lo primero que se ve. Pasará tiempo antes de que sea juzgado por su  contenido o su calidad literaria.

Los colores son determinantes y clarificadores del argumento.    Una bonita historia de amor llevará en la cubierta colores tenues, una policiaca contendrá negro, rojo y probablemente manchas de sangre.   Si alguien busca un thriller con muchas explosiones los colores pasteles no serán seguramente sus protagonistas. En cuanto a las imagines, encontraremos piernas si las historias contienen mucho dinamismo. En libros intimistas, pies desnudos o uñas pintadas. Para soñar, ojos cerrados, para la novela negra o esa reservada al mundo profesional del  crimen, una pistola será el elemento más apropiado. Un cuchillo que también es un arma, podría también asociarse a otro tipo de contenido. Si en la cubierta encontramos un cuadro del romanticismo, seguramente se tratará de un clásico. Un rostro en primer plano, significa que el autor es un político o un gurú de moda. Un ensayo no llevará imagines, contendrá solo texto sobre un fondo blanco o claro.

La portada dice mucho del contenido, a veces lo dice todo, evoca lo que sentiremos introduciéndonos en su interior a través de la lectura. La parte exterior del libro no es asunto baladí, sirve para identificar su contenido y para seducirnos con su atractivo.

Cada una de las dos cubiertas de un libro encuadernado se denominan tapas y suelen ser cartón o de un papel más grueso. También el tacto incrementa su atractivo. Marketing y psicología van de la mano y muchos editores saben llevar el diseño de la cubierta a límites insospechados  con la esperanza y casi siempre con la certeza de vender más.  La cubierta es la ventana a través de la cual nos asomamos al interior una especie de resumen visual que nos pone en guardia sobre las emociones que probaremos leyéndolo.

 

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com