Hay argumentos que sería mejor  no instrumentalizar  durante una campaña electoral. La salud es uno de ellos. No quiero decir con esto que no haya que hablar de salud o sanidad, me refiero a que no habría que manipular el argumento intencionadamente. Sin embargo, sigue habiendo políticos con muy poco buen gusto y poca ética. La salud  es un objetivo, es un fin, no es un medio para captar votos. Si algunos de los políticos que, en estos días, hacen mítines y conceden entrevistas, fueran personas de talla, hombres y mujeres de estado, no explotarían el tema  de esa manera tan ruin y, seguramente, no seguirían insistiendo en que solo votándoles a ellos no se daría  marcha atrás en lo que se ha conseguido desde hace años con el esfuerzo y el consenso de todos los españoles. Es decir, que  la sanidad publica sea gratuita y universal.  Ningun politico que llegue al poder sería tan imbecil de prescidir de esta conquista.  El procurar atender la salud de los ciudadanos desde las instituciones del Estado, poniendo todos los medios al alcance, no tiene color politico. Lo hemos comprobado en todas las Comunidades Autónomas gobernadas por unos y por otros, donde el color político en ningún caso ha orientado la decisiones de seguir o no dando el mayor servicio a los ciudadanos.  Desde que se instauró la democracia en nuestro país, se ha avanzado cada vez más. Gobernando la izquierda o la derecha, hemos aumentado el numero de hospitales y  el número de servicios. Esto lo sabemos todos. No quieren escucharlo los que por falta de argumentos y de programas, se agarran a eslóganes. Siempre  las mismas proclamas, que repiten año tras año, para ver si repitiendo siempre la misma mentira, consiguen  el voto de algún despistado o ignorante. Nuestra Sanidad Pública está entre las cinco mejores del mundo y eso lo comprueban día a día los españoles.

Sirve mucho sentido crítico cuando se escucha a un político de la izquierda radical  pintar de negro el panorama, mientras se proclaman al mismo tiempo  salvadores de la patria. Por estos lares y en estos tiempos parece que se vota con las emociones y no con la razón.  En estos años se ha puesto en marcha en España la  Cartera Común de Servicios Sanitarios, se han construido más , ¿sin embargo de que se habla?: “de recortes”.  Todos los ciudadanos tienen las mismas prestaciones en el conjunto del Estado; sin embargo, ¿quién consigue más minutos en los telediarios?: las mareas blancas. Se ha frenado el despilfarro farmacéutico; sin embargo, se asusta a la gente diciéndoles  que cada vez que  vayan al médico tendrán que pagar la visita y también las medicinas.  Nuestro problema, y vale para todos, es entender sin que las ideologías que cayeron con el muro de Berlín,  los cantos de sirenas y las milongas sentimentales de los políticos especialistas en hacerse las víctimas, pongan un velo delante de los ojos y nos impidan razonar sobre lo que dicen. Si sobre las cosas que algunos dicen y prometen en los mítines, la gente preguntara,  insistiera  y  profundizara en ellas, muchos políticos no seguirían tomando a los ciudadanos por tontos.

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com