Mirar

Vivimos mirando. Miramos gente, cosas, escaparates, letreros luminosos, árboles, comida… Miramos y, a veces, no vemos y, otras veces, nuestra mirada es tan penetrante y observadora que parece poseer el objeto de nuestra atención. Sucede con la belleza.
Hay cosas que se clavan en el alma después de haberlas mirado, es el caso del dolor o la alegría ajena, algunas otras no solamente se clavan sino que también hieren y es el caso del horror cotidiano de la mezquindad humana o los límites de la fortaleza moral de quien tuviera que dar ejemplo. Incluidos los medios de comunicación.
La ciudad de Iligan ha sido una de las más afectadas por las inundaciones producidas tras el paso de la tormenta tropical Washi en el sur de Filipinas. La situación es muy grave para los habitantes de la zona que han logrado sobrevivir al desastre. Los mas afectados, como siempre, los niños. ¿Es posible que este hecho no haya sido noticia en primera pagina de los periódicos españoles? Hacen falta fondos para agua y saneamiento, salud y protección infantil. Sin embargo, estamos desayunando, comiendo y cenando Iñaki Undargarin desde hace semanas.
Dicen que ojos que no ven corazón que no siente. Ya no se trata de miopía, se trata de ceguera. Los medios necesitan recuperar una dosis de humanidad y generosidad.