Hay gente que dice que para un poeta, para un escritor o para un periodista no exista labor más sencilla que escribir sobre su lugar de nacimiento. Sin embargo yo discrepo. Creo que se trata de una tarea difícil y arriesgada.  No me refiero solamente al riesgo de caer en un banal sentimentalismo, en el folklore o en el detallismo exagerado. Creo que la intensidad en el sentir, los recuerdos, las vivencias, hacen que se pierda algo de objetividad.

De Jerez, podría hablar de su caballo cartujano y de su  toro de lidia, de sus vinos y de sus bodegas,  de sus iglesias, palacios y casas señoriales, de su feria del caballo o de su Semana Santa, de sus bulerias o de su gastronomía,   de su fiesta de San Antón o de sus “zambombas” en Navidad, de su mercado de abastos o de su artesanos del Zoco, de la Merced o de San Dionisio, de la Real Escuela Andaluza de Arte Ecuestre o de su centro Andaluz de Flamenco,  de su Circuito de velocidad o de su Estadio de Chapín,  de su plaza de toros o de sus museos, de su Alcázar, de su teatro Villamarta o de su zoológico…

Podría hablar de todo eso sin miedo a imprecisiones o desconocimientos. De lo que no me atrevo y solo de vez en cuando hago tímidamente, es hablar de su quiete, de lo que provoca en mis ojos el color de las jacarandas,  de las huellas que han dejado las culturas que se han asentado en sus tierras, del gracejo y desenvoltura de sus vecinos, de la sabiduría sin ropajes retóricos de sus ancianos, de la sonrisas de sus mujeres, (que hace que el corazón más frio arda en llamas), del verdor insólito de sus vides, del perfume embriagador de sus damas de noche,  de sus  cielos rasos altos en primavera, de las bondades del aire fresco las mañanas de verano, del embrujo de sus angostos callejones, de la nostalgia que me asalta cuando estoy lejos, de su recuerdo constante, que se eleva cada día como un árbol dentro del alma.

Jerez es superstición y dicha, es narciso, azalea, adelfa, hortensia y crisantemo. Es una flor supersticiosa, embriagadora y venenosa. Jerez es ese rincón andaluz que me vio nacer, la patria chica, la tierra paterna,  brazos que siempre esperan.

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com