En la antigua Grecia en septiembre se celebraban fiestas en honor de Demeter, (‘diosa madre’ o ‘madre de la cebada’) y en la Edad Media se representaba septiembre con un grupo de personas vendimiando, imagen muy cercana a nuestra tierra y a nuestra cultura. Septiembre es el mes de los colores, de los perfumes del bosque y de los últimos frutos veraniegos. Los días se irán haciendo más cortos y quizás las temperaturas del aire refrescarán porque se aproxima la estación otoñal. La naturaleza se preparará para su largo sueño, las raíces beberán ávidamente los últimos rayos de sol a través de las hojas que todavía ofrecerán reservas de energía. El verano se retira y el invierno avanza. Pero esperemos que sea sólo en lo climático y no en lo social y en lo económico.

En pocos días sindicatos, empresarios y Gobierno retomarán las negociaciones para la reforma laboral, esta vez con formato tripartito y con toma de decisiones. El objetivo es mejorar el mercado de trabajo, crear más empleo de calidad y reforzar la cohesión social. Será sintomático el resultado de estas primeras reuniones para comprobar la voluntad de entendimiento que pueda propiciar un buen acuerdo. Nuestra economía no puede permitirse convulsiones de ningún tipo y ha de seguir creciendo y afianzando su ciclo de expansión. Esta buena racha, que ya dura más de 11 años y que nos está dando los recursos necesarios para modernizarnos y crecer, no debe parar. Afortunadamente el gobierno actual no está cambiando las bases de lo que fue el éxito económico del anterior legislativo y conserva, por ahora, el mismo gasto público en relación al PIB, las mismas leyes laborales y fiscales y la misma cantidad de impuestos.

Y pensando en Andalucía, también será sintomático comprobar la voluntad de diálogo y colaboración que PSOE y PP tengan en la apertura del nuevo curso sobre los grandes temas que protagonizarán nuestra política en los próximos meses: la reforma del Estatuto, la financiación autonómica o la defensa de los intereses de la comunidad autónoma en la Unión Europea.

Retos no nos faltan. Los primeros son crecer en libertad y en desarrollo del conocimiento porque sólo así permitiremos a nuestra tierra ganar la competitividad necesaria para generar bienestar y desarrollo económico. Esperemos que ningún exceso de talante y sonrisa de plástico permitan que cierta izquierda radical y separatista nos contagie a todos de ese orden sectario que renuncia al desarrollo de una sociedad libre, moderna y plural. El sectarismo siempre ha sido incompatible con el desarrollo.

Para este mes, que da inicio al nuevo curso, habrá que recordar y desear con el refranero popular: ‘’Septiembre es bueno si de primeros al final pasa sereno; si no Septiembre se tiemble’’

por @mbellido

La web del periodista Manuel Bellido Bello con opiniones, artículos y entrevistas publicados desde 1996. Manuel Bellido https://en.gravatar.com/verify/add-identity/09e264a7e3/manuelbellido% 40manuelbellido.com