De nuevo

Dejé Sevilla vacía y asfixiada en los calores de agosto para emprender algunos viajes al extranjero. La política acababa de poner el cartel de “cerrado por vacaciones”, el mes prometía telediarios aburridos y repletos de discursos de Pepe Blanco y de María Dolores de Cospedal, de los que se quedaban de guardia. Y, sin embargo, agosto nos ha dejado algo más de los ingredientes típicos de la época estival: alguna que otra improvisación de Zapatero, como la de los 420 euros para parados de larga duración, cuyo resultado final ha sido incrementar el número de ciudadanos cabreados por la poco acertada acción propagandística de este gobierno y noticias más tristes, de las que a nadie le gusta escuchar, como los fallecimientos de más personas víctimas de la gripe A. Importantes han sido los golpes dado a la logística de ETA, y está por ver en qué terminará la supuesta persecución del Gobierno al PP. Lo de la subida de impuestos también se las trae. El curso empezará dentro de pocos días y vuelvo a retomar este espacio donde compartir ideas, opiniones y experiencias. Me encantaría poder haceros partícipes de las experiencias vividas en EE.UU y en algunas ciudades europeas en este mes de agosto. Han sido muy enriquecedoras. Trataré de hacerlo en las próximas semanas antes de que otros acontecimientos me obliguen a archivarlas en la estantería de la memoria.